Esta es la historia de los tres pastorcitos portugueses a los que se les apareció la Virgen de Fátima el 13 de mayo de 1917. Lucía, de 10 años, y sus primos, Francisco de 9 años y Jacinta de 7 años, recibieron el mensaje de la Señora: el mal del mundo, la causa de sus guerras y desastres es el pecado; la oración y el sacrificio son los medios para conseguir la salvación.
Inocentes y analfabetos, los pastorcitos oyeron hablar de guerras y catástrofes, que estaban más allá de su comprensión. Francisco y Jacinta murieron pronto, ofreciendo su vida por la paz del mundo. Lucía se quedó, como le había prometido la Virgen, para extender la devoción de su Sagrado Corazón. A los 93 años, ha sido testigo de la beatificación de sus primos por el Papa Juan Pablo II, en el mismo lugar donde se les apareció la Virgen.
El 13 de mayo de 2000 se reveló el último secreto de Fátima, que ella había guardado durante 83 años. Todo lo dicho por la Señora se ha cumplido: Fátima es un extraordinario santuario que atrae a los fieles del mundo entero.
Miguel Álvarez, abogado y periodista, ha compartido la enseñanza universitaria en la Universidad Hispanoamericana de Santa María de La Rábida, con su trabajo profesional en los medios de comunicación (prensa, radio y televisión), lo que le ha llevado a acompañar a Juan Pablo II en algunos de sus viajes, ya tener una afición y un gran cariño por América y las increíbles aventuras que la constituyeron.
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